sábado, 27 de agosto de 2011

Ciudadanos protestan a "caserolazos"


CNNMEXICO


Luego de protestar "contra la apatía nacional", un grupo de ciudadanos ha convocado a "tomar las calles" México, pues el país "está en emergencia". Algunos jóvenes realizan una "asamblea permanente" y acampan en plazas públicas para decidir las acciones que tomarán, en rechazo a la violencia generada en los últimos cinco años.

La noche de este viernes, unos 300 ciudadanos, según reportó EFE, acudieron a la concentración convocada por el colectivo ContingenteMx para exigir —a golpe de cacerolas— el fin de la violencia y contra el atentado en el casino Royale, en Monterrey, en el estado norteño de Nuevo León, donde murieron 53 personas. "Ya nos quitaron los sueños, entonces despertemos", fue una de las consignas.

El regreso de los militares a sus cuarteles; la renuncia del presidente Felipe Calderón; el fin de la impunidad; el rechazo a la Ley de Seguridad Nacional; la renuncia de todos los políticos; educación, cultura y arte para todos; oportunidades para los jóvenes, y el 'cambio ya', fueron algunas de las demandas que varios oradores expresaron durante casi dos horas en el Ángel de la Independencia, monumento simbólico de la capital mexicana.

Las propuestas se inspiraban en los deseos de los participantes de "hacer algo" y replicar otras acciones ciudadanas registradas en los últimos meses en el mundo, como los indignados de España o la Revolución de Egipto. Incluso, tomaron de ellos algunas consignas o acciones, como votar "sacudiendo las palmas", como en la Plaza del Sol, en Madrid.

El Cacerolazo contra la violencia, convocado la mañana de este viernes a través de las redes sociales, quiere extenderse y convertirse en un movimiento ciudadano de proporciones nacionales, por lo que convocaron a "hacer acampada" en el Zócalo de la Ciudad de México, la plaza mayor del país, o en el mismo Ángel de la Independencia, para impulsar la participación ciudadana a partir de un pliego que proponga, como eje de la protesta, la solidaridad con las víctimas y familiares de Monterrey y de todas las ciudades que han padecido violencia.

"Somos ciudadanos preocupados y deseosos de que en nuestro país no sigan pasando estas cosas", dijo Jesús Robles Maloof, activista de derechos humanos e integrante de ContingenteMx; los organizadores convocaron la presencia de los participantes para discutir mensualmente los avances de este movimiento.

Cada uno de los oradores fue expresando sus molestias, propuestas y exhortos para dejar "el activismo de computadora" y salir a las calles a informar a los ciudadanos.

Con decenas de velas encendidas, la reunión terminó con la lectura de los nombres de las personas que murieron en el Casino Royale.

Algunos de los convocantes compartieron entonces en redes sociales su decisión de acampar ahí o en el Zócalo, pero quedarse. Sólo algunos, el resto promete que volverá.

Mientras, en cadena nacional se transmitió un mensaje del presidente Felipe Calderón condenando el terrorismo


También en Monterrey

En Monterrey, donde también se convocó a un cacerolazo, unas 40 personas repudiaron la masacre ocurrida este jueves y exigieron más resultados a las autoridades estatales y federales.

La manifestación se realizó en la Explanada de los Héroes, frente al palacio de gobierno estatal, a donde acudieron representantes de organizaciones civiles y ciudadanos, en su mayoría jóvenes.

"Participación ciudadana es el elemento esencial de la democracia", se leyó en una pancarta colocada en la plancha de la plaza, rodeada de veladoras y flores.

"25 de agosto, que no se olivide, hasta el cielo lloró"; "No somos daños colateral", fueron otros de los mensajes que se observaron en pancartas colocadas en el suelo, frente al recinto gubernamental.

Los asistentes guardaron un minuto de silencio y momentos después, en un arranque emotivo y con cazuela en mano, la joven Roberta Carrillo se dirigió a la entrada del palacio, donde los guardias de seguridad no la dejaron pasar.

"Llegamos aquí con un sentir común de dolor, estamos en luto", dijo, mientras otras personas se unieron a su reclamo y gritaron: "Estamos hartos".

El evento empezó cerca de las 20:00 horas y culminó media hora después.

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