lunes, 21 de noviembre de 2011

Iglesia católica arremete contra IFE por "caro"

EL PUEBLO


México DF.- La Arquidiócesis Primada de México afirmó que el Instituo Federal Electoral ha hecho de la democracia uno de los productos más caros de nuestro país, además de tener una enorme burocracia.


Con el paso de los años, esta institución se ha convertido en un organismo controlado por los partidos políticos y cada vez menos vinculado al interés de los ciudadanos, expresó.

En el editorial "El costo de la democracia", publicado en el semanario católico Desde la Fe, la Iglesia critica los sueldos de cada consejero del IFE, que ascienden a 170 mil pesos, sin contar los 12 mil adicionales para alimentos, 4 mil para teléfono móvil y 5 mil para gasolina, sumado a los seguros médicos y de vida.

"No cabe duda que nuestra democracia cuesta demasiado", aseguró el ediorial.

En el editorial se critica que además del organismo federal existe una institución electoral en cada estado de la República. "¿Vale la pena tanta inversión en función de una verdadera democracia?", se cuestiona.

También en el editorial se pidió a la Cámara de Diputados designar a los tres consejeros faltantes, ya que el Instituto pidió un aumento de 150 mil pesos por cada consejero, a fin de compensar la sobrearga de trabajo ante la ausencia de los tres consejeros que no han sido nombrados.

Sobre el reciente proceso electoral en Michoacán, dice que muchos de los aspirantes que pretendían contender por puestos de elección renunciaron por motivos de seguridad, ya que se sintieron presionados para participar y el Instituto Electoral local no pudo hacer algo.

Sobre los costos de la votación de los ciudadanos michoacanos en el extrajero, la Iglesia informó que esta medida resultó carísima debido a que cada voto costó al Estado 53 mil pesos, "por lo que se llega al absurdo de que habría salido más barato ir y volver al avión por cada uno de los 341 votos obtenidos", señaló.

Ante el importante año electoral de 2012, la Arquidiócesis de México dijo que es importante hacer una reflexión de la sociedad para renovar las instituciones ciudadanas.

Es tiempo de exigir a los políticos elegidos cumplir con sus promesas y sus responsabilidades, se lee en el semanario.

Es tiempo -indicó- de denunciar las corruptelas que se siguen dando y de exigir a las instituciones democrácticas que estén al servicio de los ciudadanos y no de los intereses de los partidos políticos.

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