EL PUEBLONuevamente el gobierno de Tamaulipas ofreció a la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP) uno de sus Centros de Ejecuciones y Sanciones para que allí albergue a todos los reos del fuero federal y de alta peligrosidad.
El secretario ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública, Ramón Ochoa Delgado, explicó que el gobernador, Egidio Torre Cantú insistió en el tema, en aras de que se cumpla lo establecido en el convenio suscrito entre el Estado y la Federación, en el tema de Prevención y Readaptación Social.
Dicho convenio establece que los reos considerados como peligrosos y consignados por delitos del fuero federal sean trasladados a Ceferesos.
Tamaulipas durante el 2010 ya había ofrecido a las autoridades federales uno de sus penales, esto originado por las constantes fugas masivas de reos federales de los penales de Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo.
Del 2005 al 2010 se contabilizaron ocho fugas masivas en las que lograron evadirse 346 presos.
La gota que en ese entonces derramo el vaso fue la fuga de 151 reos federales del Penal Dos de Nuevo Laredo registrada el 16 de diciembre del 2010. Por dicha acción las autoridades estatales le ofrecieron a la federación el nuevo penal que se construye en Ciudad Victoria.
Pero no hubo respuesta del gobierno del Felipe Calderón, sólo mandó más elementos federales a reforzar los penales de la frontera tamaulipeca mientras se restablecía el orden en los mismos.
Hoy de nueva cuenta la oferta que hace el gobernador Egidio Torre a la federación es que disponga de alguna de las cárceles estatales para el resguardo de los reos federales, y así intentar poner fin a las fugas masivas y a la sobrepoblación carcelaria en Tamaulipas.
El secretario ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública, Ramón Ochoa Delgado, explicó que el gobernador, Egidio Torre Cantú insistió en el tema, en aras de que se cumpla lo establecido en el convenio suscrito entre el Estado y la Federación, en el tema de Prevención y Readaptación Social.
Dicho convenio establece que los reos considerados como peligrosos y consignados por delitos del fuero federal sean trasladados a Ceferesos.
Tamaulipas durante el 2010 ya había ofrecido a las autoridades federales uno de sus penales, esto originado por las constantes fugas masivas de reos federales de los penales de Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo.
Del 2005 al 2010 se contabilizaron ocho fugas masivas en las que lograron evadirse 346 presos.
La gota que en ese entonces derramo el vaso fue la fuga de 151 reos federales del Penal Dos de Nuevo Laredo registrada el 16 de diciembre del 2010. Por dicha acción las autoridades estatales le ofrecieron a la federación el nuevo penal que se construye en Ciudad Victoria.
Pero no hubo respuesta del gobierno del Felipe Calderón, sólo mandó más elementos federales a reforzar los penales de la frontera tamaulipeca mientras se restablecía el orden en los mismos.
Hoy de nueva cuenta la oferta que hace el gobernador Egidio Torre a la federación es que disponga de alguna de las cárceles estatales para el resguardo de los reos federales, y así intentar poner fin a las fugas masivas y a la sobrepoblación carcelaria en Tamaulipas.
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