Descubren en Durango una 'megamina' de oro

Al noroeste del estado de Durango, la empresa canadiense Chesapeake Gold Corp. descubrió uno de los más grandes depósitos no desarrollados de oro y plata del mundo, en donde se construirá una mina con una inversión estimada de 3,160 millones de dólares.

De acuerdo con cálculos del proyecto, denominado Metates, la mina sería la quinta más grande del mundo, medida por la producción acumulada de oro que alcanzaría durante sus 20 años de vida, de 17.2 millones de onzas. Quedaría atrás de las minas de Pueblo Viejo (situada en República Dominicana y que posee 27 millones de onzas), Donlin Creek (Estados Unidos), Pascua Lama (Chile y Argentina) y Peñasquito (México).

También sería la quinta más grande del mundo por su producción anual de plata, de 19.4 millones de onzas.

Avanza estudio de factibilidad Chesapeake Gold Corp. informó que planea completar el estudio de prefactibilidad a finales del 2011 y comenzó un programa de perforación en el depósito. En Metates habría 467 millones de onzas de plata y 3,400 millones de libras acumuladas, según cálculos de la empresa. Con la compañía Francisco Gold Corp., Chesapeake Gold Corp. descubrió El Sausal y Marlin, otros dos proyectos mineros de clase mundial propiedad de Goldcorp, la empresa canadiense que explota Peñasquito, en Zacatecas. Apenas en enero del 2010, Peñasquito inició operaciones con una inversión de 1,600 millones de dólares y es la mina con mayores activos de Gold Corp.

Según proyecciones de la Cámara Minera de México, México podría escalar de la posición 12 a entre los cinco mayores productores de oro en el mundo en los próximos años, tomando como base los nuevos descubrimientos.

Luego de cinco años de haber descendido al segundo lugar como productor de plata en el mundo, México recuperó en el 2010 el liderazgo, superando a Perú. El país andino registró una producción minera de plata de 3,637.4 toneladas, según reportó el Ministerio de Energía y Minas de Perú. A su vez, el INEGI informó que México produjo 3,971 toneladas.

La actual bonanza se explica por los precios altos de los metales y porque el Congreso eliminó las restricciones a la inversión extranjera en diciembre de 1996. Hasta ese entonces y desde 1961, permitía a los extranjeros una participación máxima de 49% en la propiedad de las compañías mineras.