CIUDAD DE MÉXICO, México, nov 3, 2009.- El presidente de México, Felipe Calderón, y la reina Beatriz de Holanda acordaron hoy fortalecer y diversificar los vínculos económicos, culturales y científicos, en una reunión privada en el Palacio Nacional de la capital mexicana.
La monarca, acompañada por el príncipe heredero de Orange, Willem-Alexander, y la princesa Máxima, fue recibida por Calderón y su esposa, Margarita Zavala, en el Palacio Nacional, al inicio de una visita oficial de cuatro días a México.
La familia real llegó pasado el mediodía al Palacio Nacional, donde los esperaba un grupo de niños de la pequeña comunidad holandesa asentada en México.
La ceremonia de bienvenida, durante la cual no se ofrecieron discursos, se realizó en el patio central de ese edificio monumental, ubicado en el centro histórico de la Ciudad de México, donde una banda militar interpretó los himnos nacionales de ambos países.
Calderón y la monarca holandesa se reunieron en privado e hicieron "patente la firme voluntad" de "continuar fortaleciendo sus relaciones institucionales", indicó la Presidencia mexicana en un comunicado.
Además, expresaron "la disposición de sus gobiernos para ampliar y diversificar los vínculos económicos, los intercambios culturales y educativos, así como la cooperación científico-técnica y energética entre ambos países".
Igualmente, "coincidieron en señalar las importantes afinidades existentes en diversos temas prioritarios de la agenda multilateral".
Al final del encuentro a puerta cerrada, Calderón le extendió a la reina del país europeo una invitación para que participe el próximo año en los festejos conmemorativos del bicentenario de la Independencia de México y el centenario de la Revolución mexicana.
Antes de su visita al Palacio Nacional, la realeza holandesa depositó una ofrenda floral en el Monumento a los Niños Héroes del Castillo de Chapultepec.
La reina Beatriz participó, además, en un encuentro con empresarios mexicanos, acompañada de una delegación económica de alto nivel, que integran representantes de varias compañías holandesas, y esta tarde visitó el Senado de México.
Por la noche, en una cena ofrecida por Calderón en honor a la reina, el mandatario mexicano destacó los lazos de amistad entre sus países y que se remonta a 180 años.
Calderón dijo que el comercio bilateral se ha incrementado en más de ocho veces, al pasar de 800 millones de dólares en 2000 a 6,500 millones en 2008.
Por su parte la reina Beatriz respaldó, en su discurso durante la cena, la decisión de Calderón para combatir al crimen organizado y la estrategia para afrontar las consecuencias en México de la recesión mundial.
Como parte de su visita de cuatro días, la reina y los príncipes se reunirán con el alcalde de la capital mexicana, Marcelo Ebrard, recorrerán algunos museos y participarán en una reunión sobre cambio climático en la ciudad de Guanajuato.
La monarca, acompañada por el príncipe heredero de Orange, Willem-Alexander, y la princesa Máxima, fue recibida por Calderón y su esposa, Margarita Zavala, en el Palacio Nacional, al inicio de una visita oficial de cuatro días a México.
La familia real llegó pasado el mediodía al Palacio Nacional, donde los esperaba un grupo de niños de la pequeña comunidad holandesa asentada en México.
La ceremonia de bienvenida, durante la cual no se ofrecieron discursos, se realizó en el patio central de ese edificio monumental, ubicado en el centro histórico de la Ciudad de México, donde una banda militar interpretó los himnos nacionales de ambos países.
Calderón y la monarca holandesa se reunieron en privado e hicieron "patente la firme voluntad" de "continuar fortaleciendo sus relaciones institucionales", indicó la Presidencia mexicana en un comunicado.
Además, expresaron "la disposición de sus gobiernos para ampliar y diversificar los vínculos económicos, los intercambios culturales y educativos, así como la cooperación científico-técnica y energética entre ambos países".
Igualmente, "coincidieron en señalar las importantes afinidades existentes en diversos temas prioritarios de la agenda multilateral".
Al final del encuentro a puerta cerrada, Calderón le extendió a la reina del país europeo una invitación para que participe el próximo año en los festejos conmemorativos del bicentenario de la Independencia de México y el centenario de la Revolución mexicana.
Antes de su visita al Palacio Nacional, la realeza holandesa depositó una ofrenda floral en el Monumento a los Niños Héroes del Castillo de Chapultepec.
La reina Beatriz participó, además, en un encuentro con empresarios mexicanos, acompañada de una delegación económica de alto nivel, que integran representantes de varias compañías holandesas, y esta tarde visitó el Senado de México.
Por la noche, en una cena ofrecida por Calderón en honor a la reina, el mandatario mexicano destacó los lazos de amistad entre sus países y que se remonta a 180 años.
Calderón dijo que el comercio bilateral se ha incrementado en más de ocho veces, al pasar de 800 millones de dólares en 2000 a 6,500 millones en 2008.
Por su parte la reina Beatriz respaldó, en su discurso durante la cena, la decisión de Calderón para combatir al crimen organizado y la estrategia para afrontar las consecuencias en México de la recesión mundial.
Como parte de su visita de cuatro días, la reina y los príncipes se reunirán con el alcalde de la capital mexicana, Marcelo Ebrard, recorrerán algunos museos y participarán en una reunión sobre cambio climático en la ciudad de Guanajuato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario