CIUDAD DE MÉXICO, México, dic. 17, 2009.-Arturo Beltrán Leyva, uno de los capos del narcotráfico más buscados en todo el mundo, murió acribillado frente a la puerta principal del departamento donde se resguardaba junto con sus escoltas.
Durante más de una hora, Beltrán Leyva -principal jefe del cartel de Sinaloa en los últimos años- y seis de sus sicarios se atrincheraron en el departamento 202 del edificio 4 del conjunto residencial Punta Vista Hermosa, en Cuernavaca, Morelos.
Un condominio de 144 departamentos en seis torres de 12 pisos cada una.
El departamento 202, del edificio 4, donde se refugiaba Arturo Beltrán Leyva, es de aproximadamente 80 metros cuadrados.
Tiene un valor aproximado, según la página de internet http://www.guiadinmuebles.com/idx/cms/823/details.html de la inmobiliaria, de entre 2 y 3 millones de pesos.
La estancia estaba amueblada con sala y comedor. En la sala había una pantalla de plasma.
El departamento tenía dos recámaras, cocineta y un baño. Todo quedó destruido.
Desde el interior del inmueble, Beltrán Leyva y sus escoltas se enfrentaron con armas de alto poder a los elementos de la Marina-Armada de México que realizaron el operativo para su captura.
Tras el enfrentamiento, así encontraron los elementos de la Armada el cuerpo de Arturo Beltrán Leyva, quien fuera conocido en el mundo del narcotráfico como "el Jefe de Jefes".
Entre sus pertenencias encontraron decenas de billetes de mil pesos y de cien dólares.
Además, un teléfono celular con el que se presume, pidió refuerzos antes de que empezara el enfrentamiento.
Los refuerzos llegaron.
Al menos dos camionetas que lanzaron granadas y efectuaron disparos hacia el interior del conjunto residencial, hasta que los agresores fueron sometidos.
Dentro del departamento 202, se podía apreciar la destrucción que dejó el enfrentamiento.
Entre el arsenal que tenían los escoltas de Arturo Beltrán Leyva, había tres rifles, una pistola, una daga con empuñadura, cientos de cartuchos útiles, 14 cargadores de armas largas. Cientos y cientos de tiros quedaron marcados en las paredes.
Además, se hallaron en el lugar 40 mil dólares en efectivo.
Dentro del departamento murieron tres sicarios.
Uno más decidió suicidarse al verse cercado -según informaron las autoridades-, disparándose un tiro y cayendo desde el segundo piso al jardín frontal.
Otro sicario murió en el enfrentamiento a un costado del edificio. Cayó entre el muro lateral y unos arbustos.
Durante toda la madrugada, el cuerpo de Arturo Beltrán Leyva permaneció en el interior del conjunto residencial, bajo un operativo de vigilancia de más de 40 unidades de la Marina, con el apoyo del Ejército Mexicano.
A las 9 de la mañana con 10 minutos, los siete cuerpos fueron retirados del lugar, fuertemente custodiados.
Durante más de una hora, Beltrán Leyva -principal jefe del cartel de Sinaloa en los últimos años- y seis de sus sicarios se atrincheraron en el departamento 202 del edificio 4 del conjunto residencial Punta Vista Hermosa, en Cuernavaca, Morelos.
Un condominio de 144 departamentos en seis torres de 12 pisos cada una.
El departamento 202, del edificio 4, donde se refugiaba Arturo Beltrán Leyva, es de aproximadamente 80 metros cuadrados.
Tiene un valor aproximado, según la página de internet http://www.guiadinmuebles.com/idx/cms/823/details.html de la inmobiliaria, de entre 2 y 3 millones de pesos.
La estancia estaba amueblada con sala y comedor. En la sala había una pantalla de plasma.
El departamento tenía dos recámaras, cocineta y un baño. Todo quedó destruido.
Desde el interior del inmueble, Beltrán Leyva y sus escoltas se enfrentaron con armas de alto poder a los elementos de la Marina-Armada de México que realizaron el operativo para su captura.
Tras el enfrentamiento, así encontraron los elementos de la Armada el cuerpo de Arturo Beltrán Leyva, quien fuera conocido en el mundo del narcotráfico como "el Jefe de Jefes".
Entre sus pertenencias encontraron decenas de billetes de mil pesos y de cien dólares.
Además, un teléfono celular con el que se presume, pidió refuerzos antes de que empezara el enfrentamiento.
Los refuerzos llegaron.
Al menos dos camionetas que lanzaron granadas y efectuaron disparos hacia el interior del conjunto residencial, hasta que los agresores fueron sometidos.
Dentro del departamento 202, se podía apreciar la destrucción que dejó el enfrentamiento.
Entre el arsenal que tenían los escoltas de Arturo Beltrán Leyva, había tres rifles, una pistola, una daga con empuñadura, cientos de cartuchos útiles, 14 cargadores de armas largas. Cientos y cientos de tiros quedaron marcados en las paredes.
Además, se hallaron en el lugar 40 mil dólares en efectivo.
Dentro del departamento murieron tres sicarios.
Uno más decidió suicidarse al verse cercado -según informaron las autoridades-, disparándose un tiro y cayendo desde el segundo piso al jardín frontal.
Otro sicario murió en el enfrentamiento a un costado del edificio. Cayó entre el muro lateral y unos arbustos.
Durante toda la madrugada, el cuerpo de Arturo Beltrán Leyva permaneció en el interior del conjunto residencial, bajo un operativo de vigilancia de más de 40 unidades de la Marina, con el apoyo del Ejército Mexicano.
A las 9 de la mañana con 10 minutos, los siete cuerpos fueron retirados del lugar, fuertemente custodiados.
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