miércoles, 28 de diciembre de 2011

La visita del Papa tiene tintes político-electorales




EL HERALDO



Ciudad de México.- Especialista en materia religiosa aseguró que la visita del papa Benedicto XVI a nuestro país, el próximo año, es un espaldarazo para Acción Nacional en las próximas elecciones.

En entrevista con El Sol de México, el doctor Virgilio Bravo, especialista en política pública y religión del Tecnológico de Monterrey, afirmó que contrario a lo que afirma la grey católica, el Vaticano juega un poco a la política y su visita tendrá tintes políticos-electorales.

"Siempre será arriesgado visitar a un país que está en un año electoral y que sobre todo, que está la posibilidad de que el PRI regrese al poder, de que el PAN que está más cercano a la Iglesia católica pueda perder el poder".

El especialista consideró que la visita papal también está muy bien medida y muy bien calculada por el Gobierno mexicano y hasta cierto punto, en complicidad con el Vaticano para venir en una fecha en tiempos electorales.

El doctor Virgilio Bravo consideró que este tipo de manifestaciones deberían de evitarse precisamente para prever cualquier tipo de conflicto social, sobre todo, porque hay católicos en todos los partidos políticos.

El Vaticano juega un poco a la política. Quiere intervenir e influir un poco en la política mexicana. Lo han hecho siempre a través de diversos medios, factores y recursos. Hoy en día lo hacen con una visita simbólica. La presencia de Benedicto XVI en México significa también una alianza con la sociedad mexicana. Pero, como en todo, el uso de la religión también se le da el uso político.

Dejó claro que "sirve para fines políticos de quienes lo han invitado, de quienes lo quieren traer y se quieren beneficiar de su visita".

En su análisis sobre los altibajos de fieles registrados en la Iglesia católica, señaló a México como uno de los bastiones de principales de la grey para abastecerse de recursos humanos, materiales y económicos.

Por lo que, el viaje a México, es una visita obligada por todo jerarca católico, para todo Papa de hoy y del que llegue en el futuro.

"Para nosotros puede ser muy natural (el fervor religioso) convivimos con él todos los días, pero, para otros países la Iglesia católica está fuera de la toma de decisiones, y sobre todo, ha perdido seguidores".

Señaló que hay templos que en Europa se han cerrado, hay iglesias en las cuales ya no hay feligreses, ya no hay fiestas navideñas como en otros países. Yo creo que aquí en México todo el mundo quiere abrir en su estado una Basílica (de Guadalupe), tanto los políticos como los jerarcas religiosos.

Afirmó que en comparación con otros países donde ha acudido Benedicto XVI, en México será bien recibido, pues en general, hay aceptación por todos los grupos sociales en su mayoría, por los partidos políticos, por los poderes fácticos, en general la visita del Papa será bien recibida.

México -remarcó- forma parte de esos activos, de esos lugares donde se le aprecia y se le reconoce a la Iglesia católica. No tanto por al Papa actual, sino mucho a Juan Pablo II.

El especialista confió en que en su discurso, el Santo Padre, también pida perdón a las víctimas de pederastia en México como lo hizo en Alemania e Irlanda.

Sostuvo que a pesar de los escándalos de encubrimiento de casos de pederastia, Benedicto XVI seguirá visto como autoridad moral. Hechos como el de Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo, fue grave.

"Pero, él esta muerto, la Legión se está renovando, hay un interventor, hasta cierto punto, la Iglesia está actuando en consecuencia, por así decirlo, para curar las heridas, y sólo con el tiempo esto se va olvidando".

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