CIUDAD DE MÉXICO, México, feb 9, 2010.- Desde una habitación contigua al área de cuidados intensivos, María Lorgia, esposa del futbolista Salvador Cabañas, considera que se perdieron minutos vitales para la atención del jugador del América por negligencia del personal del 'Bar-Bar', quienes le ocultaron que había sido herido.
"¿Te gustaba ese lugar? Un poco, como a él le gustaba... Era un lugar chiquito y agradable, siempre había gente conocida... Cuando escuche el ruido yo estaba en el baño... Yo dije mi marido está en el otro baño... Alguien rompió el espejo o alguien rompió un vaso... Yo quise salir y me atajaron dos personas ahí", relata la señora Lorgia.
María Lorgia relata que pasaron 20 minutos buscando a su esposo en la zona de pista y el área de vehículos.
"Dije, mi marido está ahí, algo le pasó, algo pasó ahí... Uno de los guardias me dijo que 'Chava' ya salió y se fue por su carro'... Yo creo que esos minutos fueron vitales... Yo en esos minutos no pensé, todo ocurrió muy rápido", añade la esposa del futbolista.
Describe esa madrugada del 25 de enero como una noche de pareja sin excesos. No identifica a José Jorge Balderas Garza.
María Lorgia, esposa de Salvador Cabañas, ha permanecido en la habitación del hospital la mayor parte del tiempo.
Salvador Cabañas reconoce amigos y familiares, también habla con insistencia de que el América vuelva a ser campeón.
La señora Lorgia comentó que cuando le dijeron que le iban a quitar el tubo con el que respiraba ella se emocionó bastante, porque ya iba a poder hablar con él. Reveló que se comunicaban mucho a través de las manos.
"Yo le dije: ¿me quieres? Y él me respondió apretando mi mano, luego me preguntó por los niños", recuerda.
Madre de dos niños de ocho y cuatro años, describe a Salvador Cabañas como un hombre disciplinado, reservado y absolutamente comprometido con el futbol. Metió su gol 100 un año antes del atentado.
"Cuando gana sí son días felices, siempre hacemos asado en la casa... Cuando pierde él viene enojado, porque siempre da todo en la cancha... Él quiere resultados en equipo..." , dice la esposa del futbolista.
Salvador Cabañas tiene una dieta a base de proteínas, mueve las cuatro extremidades, pero podrían pasar 12 semanas más, antes de que un estudio médico arroje el verdadero estado de las funciones finas del lenguaje, memoria y movimiento.
Por último la esposa de Salvador Cabañas agradeció el apoyo de la afición americanista.
"¿Te gustaba ese lugar? Un poco, como a él le gustaba... Era un lugar chiquito y agradable, siempre había gente conocida... Cuando escuche el ruido yo estaba en el baño... Yo dije mi marido está en el otro baño... Alguien rompió el espejo o alguien rompió un vaso... Yo quise salir y me atajaron dos personas ahí", relata la señora Lorgia.
María Lorgia relata que pasaron 20 minutos buscando a su esposo en la zona de pista y el área de vehículos.
"Dije, mi marido está ahí, algo le pasó, algo pasó ahí... Uno de los guardias me dijo que 'Chava' ya salió y se fue por su carro'... Yo creo que esos minutos fueron vitales... Yo en esos minutos no pensé, todo ocurrió muy rápido", añade la esposa del futbolista.
Describe esa madrugada del 25 de enero como una noche de pareja sin excesos. No identifica a José Jorge Balderas Garza.
María Lorgia, esposa de Salvador Cabañas, ha permanecido en la habitación del hospital la mayor parte del tiempo.
Salvador Cabañas reconoce amigos y familiares, también habla con insistencia de que el América vuelva a ser campeón.
La señora Lorgia comentó que cuando le dijeron que le iban a quitar el tubo con el que respiraba ella se emocionó bastante, porque ya iba a poder hablar con él. Reveló que se comunicaban mucho a través de las manos.
"Yo le dije: ¿me quieres? Y él me respondió apretando mi mano, luego me preguntó por los niños", recuerda.
Madre de dos niños de ocho y cuatro años, describe a Salvador Cabañas como un hombre disciplinado, reservado y absolutamente comprometido con el futbol. Metió su gol 100 un año antes del atentado.
"Cuando gana sí son días felices, siempre hacemos asado en la casa... Cuando pierde él viene enojado, porque siempre da todo en la cancha... Él quiere resultados en equipo..." , dice la esposa del futbolista.
Salvador Cabañas tiene una dieta a base de proteínas, mueve las cuatro extremidades, pero podrían pasar 12 semanas más, antes de que un estudio médico arroje el verdadero estado de las funciones finas del lenguaje, memoria y movimiento.
Por último la esposa de Salvador Cabañas agradeció el apoyo de la afición americanista.
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