El presidente Felipe Calderón urgió a los líderes del Grupo de los Veinte (G-20) a no esperar más y "actuar ahora", pues los mercados financieros requieren nuevas reglas claras que eliminen la incertidumbre y den "un mapa de ruta" hacia la recuperación.
El mandatario mexicano convocó a redoblar esfuerzos a fin de lograr un acuerdo para regular los mercados, de tal manera que se reduzcan los riesgos sistémicos para el sistema financiero global y, al mismo tiempo, se promueva la recuperación económica mundial.
Para ello anunció que su gobierno enviará al Congreso de la Unión un proyecto de ley que incluya un marco de resolución para bancarrotas de bancos, basado en las mejores prácticas internacionales.
En medio de una intensa actividad desplegada en la Cumbre de Líderes del Grupo de los Veinte (G-20), el Ejecutivo federal mexicano sostuvo que para lograr los objetivos de los participantes, todos los países necesitan realizar un gran esfuerzo.
"Por eso, con gran voluntad y espíritu de colaboración los invito a seguir trabajando con determinación para construir juntos un sistema financiero global, sólido, duradero y efectivo", subrayó.
Calderón Hinojosa tuvo diversas participaciones en la cumbre de los 20 países más desarrollados, la cual concentra 85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, y que esta tarde concluyó con la adopción de una declaratoria final.
El mandatario expresó que en el momento más grave de la crisis, los países enfrentaron el dilema de recuperar el crecimiento o mantener la estabilidad fiscal; al optar por el primero, pusieron en práctica políticas monetarias y fiscales efectivas en un número importante de naciones.
La estrategia funcionó en lo general, pero en algunos países la política económica dejó de promover el regreso hacia los equilibrios fiscales "y se están pagando ciertas consecuencias que, paradójicamente, se están constituyendo en uno de los principales inhibidores del crecimiento".
El presidente Calderón -quien esta tarde volverá a la ciudad de México, a la que llegará por la noche- advirtió también que economías con déficit y con deudas públicas crecientes están en proceso de convertirse en uno de los obstáculos mayores para el desarrollo de la economía mundial.
Destacó ante ello que es prioritario recuperar la credibilidad sobre la viabilidad financiera, para evitar que se afecten tanto los proyectos de inversión como las expectativas de crecimiento.
Al mismo tiempo alertó sobre los riesgos para el crecimiento futuro de la permanencia de políticas expansivas y sus altos déficits, toda vez que la deuda pública en países industriales está a niveles nunca vistos -de 83 por ciento del PIB de Estados Unidos, 68 por ciento en el Reino Unido y 73 por ciento en Alemania-, ante lo cual "deben analizarse sus implicaciones".
En su exposición, Calderón Hinojosa compartió las reformas estructurales realizadas por México que han permitido el crecimiento del país.
Entre ellas citó el incremento en la inversión para infraestructura con el fin de llevarla de tres a cinco por ciento del PIB, los cambios fiscales que han incrementado los ingresos públicos en tres por ciento del PIB, así como la liquidación de empresas públicas deficitarias.
El jefe de del Estado mexicano externó que México respalda la propuesta acumulada en la cumbre del G-20 para enfrentar los problemas asociados a las instituciones financieras de importancia sistémica.
Consideró que dentro del conjunto de medidas para hacer frente a los problemas que plantean estas instituciones, están el establecimiento de un marco constitucional para resolver quiebras de instituciones sistémicas y la emisión de bonos convertibles en capital por las instituciones financieras.
Asimismo, se pronunció por el establecimiento de cargos de capitales adicionales para las actividades que generan riesgos sistémicos y por el fortalecimiento de la coordinación internacional entre supervisores.
Esas medidas, consideró, permitirán contar con información oportuna y establecer estrategias para resolver las quiebras de estas instituciones que están presentes en diversos países.
Propuso además ampliar el alcance de la regulación para incluir otras entidades, instrumentos y mercados que puedan generar riesgos sistémicos, así como diseñar medidas conjuntas para identificar jurisdicciones no cooperantes y fortalecer el intercambio de información.
Calderón Hinojosa afirmó que es necesario establecer una definición de capital y de estándares de liquidez más estrictos, los cuales consideren las dificultades para medir adecuadamente los riesgos.
"Tenemos que alcanzar un acuerdo en la materia lo más pronto posible y asegurar un periodo de transición suficiente para evitar efectos colaterales en la recuperación global", recalcó
El mandatario mexicano convocó a redoblar esfuerzos a fin de lograr un acuerdo para regular los mercados, de tal manera que se reduzcan los riesgos sistémicos para el sistema financiero global y, al mismo tiempo, se promueva la recuperación económica mundial.
Para ello anunció que su gobierno enviará al Congreso de la Unión un proyecto de ley que incluya un marco de resolución para bancarrotas de bancos, basado en las mejores prácticas internacionales.
En medio de una intensa actividad desplegada en la Cumbre de Líderes del Grupo de los Veinte (G-20), el Ejecutivo federal mexicano sostuvo que para lograr los objetivos de los participantes, todos los países necesitan realizar un gran esfuerzo.
"Por eso, con gran voluntad y espíritu de colaboración los invito a seguir trabajando con determinación para construir juntos un sistema financiero global, sólido, duradero y efectivo", subrayó.
Calderón Hinojosa tuvo diversas participaciones en la cumbre de los 20 países más desarrollados, la cual concentra 85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, y que esta tarde concluyó con la adopción de una declaratoria final.
El mandatario expresó que en el momento más grave de la crisis, los países enfrentaron el dilema de recuperar el crecimiento o mantener la estabilidad fiscal; al optar por el primero, pusieron en práctica políticas monetarias y fiscales efectivas en un número importante de naciones.
La estrategia funcionó en lo general, pero en algunos países la política económica dejó de promover el regreso hacia los equilibrios fiscales "y se están pagando ciertas consecuencias que, paradójicamente, se están constituyendo en uno de los principales inhibidores del crecimiento".
El presidente Calderón -quien esta tarde volverá a la ciudad de México, a la que llegará por la noche- advirtió también que economías con déficit y con deudas públicas crecientes están en proceso de convertirse en uno de los obstáculos mayores para el desarrollo de la economía mundial.
Destacó ante ello que es prioritario recuperar la credibilidad sobre la viabilidad financiera, para evitar que se afecten tanto los proyectos de inversión como las expectativas de crecimiento.
Al mismo tiempo alertó sobre los riesgos para el crecimiento futuro de la permanencia de políticas expansivas y sus altos déficits, toda vez que la deuda pública en países industriales está a niveles nunca vistos -de 83 por ciento del PIB de Estados Unidos, 68 por ciento en el Reino Unido y 73 por ciento en Alemania-, ante lo cual "deben analizarse sus implicaciones".
En su exposición, Calderón Hinojosa compartió las reformas estructurales realizadas por México que han permitido el crecimiento del país.
Entre ellas citó el incremento en la inversión para infraestructura con el fin de llevarla de tres a cinco por ciento del PIB, los cambios fiscales que han incrementado los ingresos públicos en tres por ciento del PIB, así como la liquidación de empresas públicas deficitarias.
El jefe de del Estado mexicano externó que México respalda la propuesta acumulada en la cumbre del G-20 para enfrentar los problemas asociados a las instituciones financieras de importancia sistémica.
Consideró que dentro del conjunto de medidas para hacer frente a los problemas que plantean estas instituciones, están el establecimiento de un marco constitucional para resolver quiebras de instituciones sistémicas y la emisión de bonos convertibles en capital por las instituciones financieras.
Asimismo, se pronunció por el establecimiento de cargos de capitales adicionales para las actividades que generan riesgos sistémicos y por el fortalecimiento de la coordinación internacional entre supervisores.
Esas medidas, consideró, permitirán contar con información oportuna y establecer estrategias para resolver las quiebras de estas instituciones que están presentes en diversos países.
Propuso además ampliar el alcance de la regulación para incluir otras entidades, instrumentos y mercados que puedan generar riesgos sistémicos, así como diseñar medidas conjuntas para identificar jurisdicciones no cooperantes y fortalecer el intercambio de información.
Calderón Hinojosa afirmó que es necesario establecer una definición de capital y de estándares de liquidez más estrictos, los cuales consideren las dificultades para medir adecuadamente los riesgos.
"Tenemos que alcanzar un acuerdo en la materia lo más pronto posible y asegurar un periodo de transición suficiente para evitar efectos colaterales en la recuperación global", recalcó
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