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Puebla.- Para escapar del penal de San Pedro Cholula, 11 reos hicieron en la madrugada un boquete en una de las paredes, por lo que 17 custodios fueron detenidos; el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas prometió una investigación a fondo.
El Centro de Reinserción Social (Cereso) está en la avenida Miguel Hidalgo, entre 7 y 9 Norte, a tres calles del zócalo, en una zona céntrica, envuelto por viviendas y comercios, por lo que en anteriores ocasiones los vecinos han solicitado su reubicación.
Los reclusos que huyeron son: Armando Amador Romero, Gerardo Silva Ramírez, Israel Ramírez Hernández, Julio César Apon, Ángel Irwin Osorio, Israel Cruz Arriota, Ulises Anaya García, Fernando Aro Téllez, José Juan Castro Gallegos, Iván Espinoza y José Diego Franklyn Contreras, quien está considerado de alta peligrosidad.
Según datos oficiales, Franklyn Contreras sumaría su tercera fuga de un reclusorio.
Purgaba una condena por cohecho. Provenía de Altamira, Tamaulipas. En el pasado ya fue procesado por delincuencia organizada y secuestro. En esta ocasión, habría organizado la fuga.
Asimismo, Anaya García y Castro Gallejos están sentenciados por el delito de homicidio; el resto estarían condenados por secuestro y otros delitos considerados como graves.
Según las autoridades municipales, la fuga se habría registrado entre las 2:00 y 3:00 horas de este domingo.
Según los vecinos, escucharon ruidos extraños, pero prefirieron no hacer caso. Minutos después vieron una nube de humo sobre la calle 7 Sur y descubrieron el hoyo, pero no se atrevieron a denunciar por temor a represalias.
El Cereso quedó bajo resguardo del Ejército mexicano y la Policía Estatal, en coordinación con las fuerzas municipales, las cuales buscan a los 11 fugitivos cuyas características ya fueron boletinadas a las corporaciones policiacas para su localización.
Ante tal situación, entrevistado en la primera ceremonia de premiación del Maratón de Puebla, Moreno Valle Rosas garantizó que las indagatorias llegarán a sus últimas consecuencias.
Cabe señalar que el pasado 21 de noviembre, el director de esta penitenciaría, Jorge Daniel Martínez Casco, destituyó al subdirector de Seguridad y Custodia, Henry Martínez Ricardo, así como al subdirector técnico, Luis Enrique Apodaca Primo, luego de las quejas de familiares de internos por cobros de cuotas por visita íntima, venta de actas de concubinato, restricción de ingreso de comida y de visitas familiares, así como la prohibición de juegos de mesa, como el ajedrez.
Familiares advirtieron que estos y otros abusos "calentaban y enardecían" a la población penitenciaria, por lo que exigieron una investigación a las autoridades competentes, ya que incluso una rosticería se convirtió en un negocio rentable para sus directivos.
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