En el marco del Foro "Respuestas a las Preguntas que podrían transformar a Mexico", Peña Nieto resaltó que su partido cuenta con una amplia base social, que está integrado por millones de trabajadores comprometidos y dijo que él forma parte de una "generación que ha crecido en una cultura democrática y quiere seguir viviendo en la democracia. Vamos a ganar el futuro que merecemos, no a reinstaurar pasados que superamos. Hoy, como candidato del PRI, aspiro a ser un presidente democrático".
En este evento, delineó los ejes rectores de su gobierno, para la construcción de un país unido y fuerte a partir del reconocimiento y respeto de la diversidad de nuestras convicciones e ideas.
El documento, detalla 10 puntos en los que será respetuoso de la libertad de manifestación, ya que esta ha sido pilar de nuestra cultura democrática, ya que como "Presidente de la República protegeré el ejercicio de este derecho en todos los espacios públicos del territorio nacional y fomentaré una cultura de respeto y tolerancia a todas las expresiones políticas".
Asimismo, refrendo su compromiso con la libertad de expresión y puntualizó que como Presidente de la República aceptara las criticas en todos sus estilos y formatos, mismas que serán escuchadas, respetadas y tomadas en cuenta, esto porque "en una Presidencia democrática no caben ni la violencia en contra de periodistas, ni la censura".
En la lectura del mensaje, el político mexiquense mencionó que la relación con los medios será acorde de nuestra cultura democrática.
"Como Presidente de la República impulsaré una reforma constitucional para crear una instancia ciudadana y autónoma que supervise que la contratación de publicidad de todos los niveles de gobierno en medios de comunicación se lleve a cabo bajo los principios de utilidad pública, transparencia, respeto a la libertad periodística y fomento del acceso ciudadano a la información. Sólo un país bien informado garantiza una cultura democrática".
El abanderado presidencial de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y del Verde Ecologista de México (PVEM) en su manifiesto, puso especial énfasis en el respeto a los derechos humanos debe ser premisa fundamental para el uso de la fuerza pública y anunció que promoverá reformas constitucionales y legales necesarias para asegurar la vigencia de protocolos de respeto a los derechos humanos en la actuación de las Fuerzas Armadas y las policías de todo el país y resaltó que las recomendaciones que en su caso emita la Comisión Nacional de Derechos Humanos al gobierno federal serán acatadas y prontamente adoptadas.
"Promoveré las reformas necesarias a las leyes secundarias para darle eficacia a la reciente reforma constitucional en materia de derechos humanos, y el gobierno federal tendrá un rol significativamente más activo en la promoción de una cultura de respeto a los derechos humanos".
En torno a la libertad religiosa: "encabezaré un gobierno laico, respetuoso de la libertad de creencias y de las prácticas religiosas de todos los mexicanos", acotó.
En el tema de la discriminación, Enrique Peña se propuso utilizar el poder presidencial como una herramienta para acabar con la discriminación en México.
"Gobernaré sin prejuicios y promoveré una cultura de respeto e inclusión en la vida social y productiva de todas las minorías, así como de las personas con discapacidad. En política migratoria, daremos un trato a los migrantes en México como el que exigimos para nuestros paisanos en el extranjero".
Sobre la división de poderes: "ejerceré la Presidencia de la República con respeto a la división de poderes. El diálogo y la concertación legítima serán los instrumentos primordiales del gobierno. Me comprometo a tener un diálogo permanente y directo con los liderazgos de todas las fracciones parlamentarias que permitan que las grandes reformas que necesita México se logren con amplios consensos, con independencia de la correlación de las fuerzas políticas en el Congreso de la Unión. Igualmente me comprometo a respetar la genuina independencia del Poder Judicial y de los órganos autónomos".
Por lo anterior, Enrique Peña Nieto buscará el mayor consenso entre las fuerzas políticas antes de enviar al poder legislativo las propuestas de nombramientos de ministros de la suprema corte e integrantes de los órganos autónomos. "En política entendemos nuestro tiempo, y habremos de hacerla bajo los principios y formas del siglo XXI".
Y para garantizar elecciones libres, "como Presidente de la República no tendré intervención alguna en los procesos electorales, salvo garantizar que existan siempre las condiciones de seguridad y paz para el desarrollo de campañas y jornadas electorales", aseveró el oriundo de Atlacomulco y además propuso que junto con el Instituto Federal Electoral (IFE), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y los partidos políticos "mantendré una relación de respeto institucional. Promoveré iniciativas de reforma para erradicar definitivamente el uso electoral de los programas sociales de los tres niveles de gobierno".
Para la conformación de su eventual gobierno, la transparencia y rendición de cuentas será importante porque en "una presidencia democrática es también una presidencia eficaz y transparente en el uso de los recursos públicos".
Impulsará la creación de la Comisión Nacional Anticorrupción, como una instancia autónoma con capacidad de actuar ante casos de corrupción gubernamental en el nivel federal, estatal y municipal a partir de denuncias ciudadanas, y que el titular de la misma deberá ser aprobado por mayoría calificada en el Senado de la República.
Asimismo, respatará y acatará las decisiones del Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI), y que promoverá su fortalecimiento institucional.
"Como Presidente de la República seleccionaré un equipo de colaboradores a partir de su capacidad, experiencia y honestidad, no de sus relaciones familiares o de amistad. El Presidente de la República y los mandos superiores del gobierno haremos pública nuestra declaración patrimonial, que deberá ser auditada cada año, y propondré a senadores y diputados que hagan lo mismo".
En el último punto del Manifiesto, en el federalismo y transparencia, ofreció replantear la relación política entre el Gobierno federal y los gobiernos de los estados y municipios, en un marco de respeto al federalismo: "El Gobierno federal debe apoyar con vigor y compromiso la acción de los gobiernos estatales y municipales, pero debe también ser un activo promotor de una cultura de responsabilidad, transparencia y rendición de cuentas en el uso de los recursos públicos.
"Aceleraré, dijo, la plena implementación de las reformas constitucionales en materia de transparencia y homologación contable en los estados y municipios, promoveré el fortalecimiento y autonomía legal y política de los órganos de fiscalización en los estados, y promoveré una reforma constitucional para dotar al Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos de competencia en asuntos de los estados y municipios".
En el encuentro, Enrique Peña resaltó que los principios contenidos en el documento "parten de mi convicción de que los próximos seis años serán determinantes para consolidar las libertades políticas de los mexicanos y dar vigor y contenido a nuestra democracia".
Propuso a los mexicanos un diálogo abierto y franco para la construcción de una nueva presidencia democrática, al tiempo de convocar a intelectuales, académicos, políticos de todas las militancias, organizaciones no gubernamentales, jóvenes universitarios y a la ciudadanía en general a dialogar sobre el Manifiesto, enriquecerlo y definir mecanismos que aseguren su vigencia. Les propongo que vayamos juntos a ganar el futuro.
"Convoco a los mexicanos a construir una presidencia democrática a la altura de nuestras esperanzas".
Después de la presentación, el exsecretario de Gobernación Fernando Gómez Mont comentó que más que un gobierno de coalición sino de consensos, mientras que la excandidata a la Presidencia del 94, Cecilia Soto, dijo que el manifiesto del político mexiquense no dio los cómos ni incluyó a las mujeres, a lo que el exgobernador respondió que será con voluntad.
Por último, el empresario Alejandro Martí cuestionó a Peña Nieto sobre la solución a mediano plazo de la seguridad y en algunos cómos en propuestas como el incremento de la Policía Federal y la permanencia de las Gendarmerías.
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