EL PUEBLOEn medio de protestas y rechazo a los exámenes de control y confianza, ayer más de una centena de policías municipales de Coahuila fueron cesados.
Un total de 81 agentes de Saltillo y 12 de Monclova fueron despedidos por no acreditar los exámenes, mientras que en Progreso, los ocho elementos de la Policía Preventiva y el director de la corporación presentaron su renuncia, ante el rechazo de que les sean aplicadas las pruebas.
El abogado representante de los policías preventivos y efectivos adscritos a la Subdirección de Tránsito en Saltillo, Patricio Labastida González, informó que una centena de elementos fueron dados de baja sin previo aviso.
Indicó que el despido fue aplicado durante el pase de lista, por lo que se pedirá a las autoridades la reinstalación de sus puestos o demandarán al municipio por despido injustificado y pedirán su indemnización acorde con la ley. Expuso que hay elementos con 28 años de antigüedad; personal al que sólo le faltaban algunos meses para pensionarse y en otros casos se trata de mujeres que son el sustento de su familia.
El municipio de Saltillo, a través del área de Comunicación Social, informó que sólo se dio de baja a 81 elementos por no acreditar las pruebas de confianza. Precisa que la medida se aplicó con base a los acuerdos estatales y nacionales de seguridad, y a las reglas del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los elementos despedidos se manifestaron en la Presidencia Municipal de Saltillo. Aseguraron que las citadas pruebas de confianza fueron aplicadas desde hace un año y las últimas hace seis meses.
Temen por su baja escolaridad
La síndico de Progreso, Rocío de León Medellín, aseguró que los policías “son gente sencilla campirana que no tiene nexos con la delincuencia, ni son adictos a las drogas, pero sólo estudiaron primaria o secundaria y no se sienten capacitados para presentar las pruebas que les aplicarían en Saltillo”.
Los policías de Progreso trabajarán hasta el 15 de enero, para cobrar su salario; en promedio ganan 2 mil 500 pesos por quincena.
A partir de la próxima semana, la seguridad en Progreso quedará a cargo del Ejército, informó el vocero de Seguridad Pública del gobierno de Coahuila, Sergio Sisbeles.
Sitian sede policiaca
Elementos del Ejército y policías de Nuevo León sitiaron la Secretaría de Seguridad Pública de Santa Catarina, para trasladar a los policías a Monterrey, donde se les aplicarán los controles de confianza.
En Reynosa, Tamaulipas, elementos de las fuerzas federales desactivaron un coche-bomba que presuntamente la delincuencia organizada pretendía explotar en la sede de la Policía Ministerial.
Un total de 81 agentes de Saltillo y 12 de Monclova fueron despedidos por no acreditar los exámenes, mientras que en Progreso, los ocho elementos de la Policía Preventiva y el director de la corporación presentaron su renuncia, ante el rechazo de que les sean aplicadas las pruebas.
El abogado representante de los policías preventivos y efectivos adscritos a la Subdirección de Tránsito en Saltillo, Patricio Labastida González, informó que una centena de elementos fueron dados de baja sin previo aviso.
Indicó que el despido fue aplicado durante el pase de lista, por lo que se pedirá a las autoridades la reinstalación de sus puestos o demandarán al municipio por despido injustificado y pedirán su indemnización acorde con la ley. Expuso que hay elementos con 28 años de antigüedad; personal al que sólo le faltaban algunos meses para pensionarse y en otros casos se trata de mujeres que son el sustento de su familia.
El municipio de Saltillo, a través del área de Comunicación Social, informó que sólo se dio de baja a 81 elementos por no acreditar las pruebas de confianza. Precisa que la medida se aplicó con base a los acuerdos estatales y nacionales de seguridad, y a las reglas del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los elementos despedidos se manifestaron en la Presidencia Municipal de Saltillo. Aseguraron que las citadas pruebas de confianza fueron aplicadas desde hace un año y las últimas hace seis meses.
Temen por su baja escolaridad
La síndico de Progreso, Rocío de León Medellín, aseguró que los policías “son gente sencilla campirana que no tiene nexos con la delincuencia, ni son adictos a las drogas, pero sólo estudiaron primaria o secundaria y no se sienten capacitados para presentar las pruebas que les aplicarían en Saltillo”.
Los policías de Progreso trabajarán hasta el 15 de enero, para cobrar su salario; en promedio ganan 2 mil 500 pesos por quincena.
A partir de la próxima semana, la seguridad en Progreso quedará a cargo del Ejército, informó el vocero de Seguridad Pública del gobierno de Coahuila, Sergio Sisbeles.
Sitian sede policiaca
Elementos del Ejército y policías de Nuevo León sitiaron la Secretaría de Seguridad Pública de Santa Catarina, para trasladar a los policías a Monterrey, donde se les aplicarán los controles de confianza.
En Reynosa, Tamaulipas, elementos de las fuerzas federales desactivaron un coche-bomba que presuntamente la delincuencia organizada pretendía explotar en la sede de la Policía Ministerial.
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